Por Elena Nieves / 2012
Prólogo exposición CERTEZAS de Oscar Padrevecchi, Galería Archimboldo, Buenos Aires. Del 16 de abril al 4 de mayo de 2012
OSCAR PADREVECCHI
Haciendo música visual con grampas -o “grapas” como prefiere denominarlas Oscar Padrevecchi- podría ser una frase alusiva para referirnos a su muestra actual.
La serie de obras que presenta en esta oportunidad nos sorprenden por el singular protagonismo de uno de los elementos que elige: el ganchito metálico de la engrampadora. Este elemento tan común entre los pintores porque es el medio por el cual se fija la tela al bastidor y que, por lo general, es invisible al espectador de la obra por estar oculto detrás de la imagen presentada, Padrevecchi en un gesto drástico de inversión nos lo muestra como protagonista y hacedor de la imagen. La grapa es utilizada como elemento constructivo y módulo lineal de menos de un centímetro de longitud. Las grapas, en cantidad, son agrupadas, superpuestas, alineadas, dispersadas, las hace convivir con manchas y gestos pictóricos de acrílico, grafito, pastel, marcador, etc. Ha decidido transformarla en medio de realización, y este giro determina el carácter más destacado de sus obras. Utiliza, además, pintura acrílica, grafito, fotocopias, sobre papel, tela, cartón, plástico autoadhesivo y demás materiales que se simplifican bajo la abarcadora expresión de “técnicas mixtas”, en las que todo material y procedimiento puede entrar. Estás prácticas, difíciles de circunscribir en razón de la diversidad de soportes, materiales y procedimientos técnicos son una de las características de lo que se denomina “arte contemporáneo”. La técnica que emplea Padrevecchi va más allá del collage –técnica nacida de las vanguardias europeas modernas de la primera década del siglo pasado que, junto con los primeros ready made, se propusieron afrontar a su modo la crisis de la representación en la pintura europea de ese entonces, crisis ya superada más de un siglo después.
Las obras que Oscar Padrevecchi nos presenta en esta oportunidad despliegan a través de su técnica una poética abstracta musical, plena de ritmo, reiteración y silencios, una melodía acompasada a través del repiqueteo de las mínimas grapas.